Una auditoría encargada por la actual junta del PEN Club Català, que desde junio del año pasado preside la poeta Àngels Gregori, ha detectado "irregularidades económicas" por valor de 280.000 euros, según informa la Ara, durante la etapa de su predecesora, la catedrática de Literatura y traductora Carmen Arenas.
El PEN Club Català ha decidido emprender acciones legales y lo planteará el 11 de junio en una asamblea extraordinaria a los 500 socios de la entidad para que la avalen. El único nombre que aparecería como persona demandada en la acción de responsabilidad es el de Carmen Arenas, al que se le pediría "el resarcimiento de los daños económicos causados a la asociación PEN Català", no sólo en su etapa de presidenta (2010-2018), sino también cuando ejercía de secretaria general (2002 a 2010).
La cifra que se considera extraída de las cuentas sin justificación asciende a 280.000 euros en un periodo de 10 años. Las anomalías irían más allá, porque se habría dispuesto de dinero en contra de lo que dicen los estatutos -con una sola firma de Arenas y no dos, como está fijado- y habría cantidades pendientes de declarar.
El 80% del presupuesto de la asociación catalana, que en el último lustro ha sido de entre 200.000 y 250.000 euros, proviene de subvenciones públicas de las instituciones catalanas (Presidencia de la Generalitat, Ayuntamiento de Barcelona, Diputación, Institució de les Lletres Catalanes y convenios puntuales).