Emilio Ablanedo, autor del libro "Confederación" ve en esta entrevista un “paralelismo evidente” entre el conflicto y la crisis catalana del 1-0. El autor, que era también subdelegado del gobierno en Cataluña en el 2017, destaca que los estados del sur también quisieron crear "estructuras de estado" pero que al final tampoco pudieron hacerse con el “control del territorio”.
“Construyeron estructuras de estado y quisieron ocupar el territorio pero fracasaron porque no pudieron”, insiste. Ablanedo recuerda la resistencia de Fort Sumter al inicio de la guerra civil -frente a la ciudad de Charleston (Carolina de Sur)-, que demostró que los Estados Unidos “dominaban todavía sus fronteras”.
“No solamente basta con declararse independiente, sino que hay que ocupar de facto el territorio”, prosigue porque "el derecho internacional público se basa en las relaciones de fuerza". "El derecho es una expresión de la fuerza", añade más adelante.
“El Sur no consiguió el control del territorio” como se vio con la guerra civil porque “para ejercer la soberanía hay que controlar el territorio” y los Estados Unidos “asfixiaron la Confederación con el bloqueo naval y el Plan Anaconda”.
También critica, en este sentido, el viaje que hizo el entonces consejero de Exteriores, Raúl Romeva, que se fotografió ante la estatua de Lincoln en Washington. “Lincoln es el presidente que acabó con el separatismo en Estados Unidos”, recuerda.
A su juicio la imagen de Romeva muestra la “talla intelectual de estos dirigentes que han llevado Cataluña al desastre” porque “grandes sectores de la sociedad catalana tienen una ignorancia supina”.
El autor, que ha recorrido también los escenarios de las batallas y se confiesa un “friki absoluto”, explica por otra parte que “Lincoln pensaba de una forma muy similar a la que pensaba el general Lee”.
“Repudiaba la esclavitud pero más por razones económicas que morales”, añade. Incluso que no creía “realmente en la igualdad racial” o que blancos y negros “pudieran convivir” en el mismo territorio.